viernes, 29 de agosto de 2008

Objetivos Educativos Scouts: CREATIVIDAD


Concepto

Otro aspecto relevante en el desarrollo de la personalidad es el que dice relación con los procesos cognoscitivos y el desarrollo intelectual.

Descubrir la información, almacenarla, hacer inferencias y sacar conclusiones, valorar la calidad de ideas y soluciones, discernir entre ellas, son tareas propias de la inteligencia, que van desde los simples esquemas infantiles hasta los conceptos más elaborados de la adolescencia y la vida adulta.
El Movimiento Scout valora en este campo la adquisición y el ejercicio de la capacidad de pensar y de innovar.

La posesión de un abundante depósito de conocimientos debe distinguirse de la libertad para usar este conocimiento. Al joven dotado de una variada gama de imágenes y conceptos acostumbramos considerarlo inteligente, pero al que utiliza ese cúmulo de manera original y relevante, aportando soluciones o productos nuevos, lo llamamos creativo.

La creatividad es un concepto que ha recibio mucha atención e innumerables definiciones en la época contemporánea; y no está referida sólo a la creación artística, como tampoco es un don especial recibido en el paquete hereditario.

Es una aptitud que existe en la persona y que es preciso hacer brotar. Para que surja, se necesita además educar una actitud creativa, caracterizada por una apertura de la persona a la plenitud de sus experiencias, sensible a lo que acontece en su entorno, a los demás seres humanos y, sobre todo, sensible a lo que descubre dentro de si mismo.

La insatisfacción de las necesidades prioritarias, como las fisiológicas, la seguridad, el amor, la estima; la falta de conocimientos suficientes, el apego a reglas antiguas, el miedo al error y al fracaso, la incapacidad para la aventura, el ambiente severo, el conformismo con el entorno, la censura sistemática, constituyen serios obstáculos al desarrollo de la creatividad.

Por eso el movimiento Scout introduce en su programa experiencias estimulantes, novedosas y provocativas que motivan a los jóvenes por lo poco frecuente, por lo nuevo, por lo que todavía no se repite. Un joven que egresa del Movimiento ha vivido en una atmósfera facilitante de cordialidad, seguridad y libertad, donde ha sido invitado a lanzar lejos la mirada, pero bajo el gesto atento del adulto que refuerza, orienta y apoya.
Objetivos terminales (y sus objetivos intermedios)
1. Incrementa continuamente sus conocimientos mediante la autoformación y el aprendizaje sistemático.
* Interés por el aprendizaje y la autoformación
* Manejo de la información
* Práctica de la lectura
2. Actúa con agilidad mental ante las situaciones más diversas, desarrollando su capacidad de pensar, innovar y aventurar.
* Desarrollo de la capacidad de pensar
* Incentivación de la capacidad de innovar.
* Desarrollo de la capacidad de aventurar.
3. Une los conocimientos teórico y práctico mediante la aplicación constante de sus habilidades técnicas y manuales.
4. Elige su vocación considerando conjuntamente sus aptitudes, posibilidades e interses; y valora sin prejuicios las opciones de los demás.
5. Expresa lo que piensa y siente a través de distintos medios, creando en los ambientes que actúa espacios gratos que faciliten el encuentro y el perfeccionamiento de las personas.
6. Valora la ciencia y la tecnología como medios para comprender y servir al hombre, la sociedad y el mundo.

martes, 26 de agosto de 2008

Objetivos Educativos Scouts: CORPORALIDAD


Concepto

En el amplio abánico el desarrollo de la personalidad, lo primero que se evidencia es la sungular y misteriosa relación de una persona con su cuerpo.


Alma y cuerpo realizan su unidad a cada instante en el movimiento de la vida, en una interdependencia díficil de medir, pero real.


Es así como el desarrollo integral de una persona no sólo depende de los factores inmateriales, como los espirituales, los psicológicos, o lo culturales. También está sujeto a factores físicos, los que interactúan en la determinación de las características de la personalidad.


Por otra parte, el cuerpo, objetivado y conocido cada día más por la ciencia, no sólo crece y funciona en razón de una serie de cambios y procesos sujetos a leyes propias, sino que es posible obtener a su respecto un punto en plenitud, al cual los niños y los jóvenes pueden acercarse, por su propia intervención, cada día un poco más.


Entendemos entonces por desarrollo corporal el ejercicio de esa cuota de responsabilidad personal en el crecimiento y funcionamiento del propio cuerpo.


Para los Scouts, a quienes ese misterio de la integración de la materia y del espíritu nos maravilla como un signo de la trascendencia humana, la responsabilidad por nuestro cuerpo es también una consecuencia vital de reconocerlo como obra de Dios, puesta para su alabanza y testimonio.


Objetivos terminales (y sus intermedios)

1. Asume la parte de responsabilidad que le corresponde en el desarrollo armónico de su cuerpo.

* Este objetivo terminal comprende un sólo concepto, en su aproximación, sus objetivos intermedios se formulan de acuerdo a cada rango de edad.


2. Conoce los procesos biológicos que regulan su organismo, protege su salud, acepta sus posibilidades físicas y orienta sus impulsos y fuerzas.

* Conocimiento de los procesos biológicos que regulan el organismo.

* Protección de la salud.

* Aceptación de las propias posibilidades físicas.

* Orientación de impulsos y fuerzas.

3. Valora su aspecto y cuida su higiene personal y la de su entorno.

* Valoración del aspecto y cuidado por la higiene personal

* Cuidado por la higiene de su entorno

4. Mantiene una alimentación sencilla y adecuada

5. Administra su tiempo equilibradamente entre sus diversas obligacines, practicando formas apropiadas de descanso.

* Administración equilibrada del tiempo.

* Práctica de formas adecuadas de descanso.

6. Conviven constantemente en la naturaleza y participa en actividades deportivas y recreativas.

* Vida al aire libre

* Participación en actividades deportivas

* Participación en juegos y actividades recreativas.

martes, 19 de agosto de 2008

Objetivos Educativos del Movimiento Scout.

LAS AREAS DE CRECIMIENTO
Asombrado ante la amplitud de la naturaleza humana e interesado en el hombre completo. El Movimiento Scout se propone la díficil tarea de contribuir al desarrollo equilibrado de las diversas dimesiones de la personalidad de los jóvenes, suscitando, formando y dando oportunidades de pleno despliegue a la variedad de expresiones de la persona.

Para lograr ese propósito, la progresión educativa Scout establece áreas de crecimiento que consideren esa pluralidad y la ordenan con base en la estructura de la personalidad. Como esta estructura ha sido objeto de múltiples teorías e interpretaciones, la proposición del Movimiento opta por una distinción que proviene fundamentalmente de su experiencia y se conjuga en seis áreas de crecimiento tanto los conceptos generalmente aceptados sobre la naturaleza humana comolos énfasis propios de su proyecto educativo.

  • Dada la evidencia física de la persona y la importancia ineludible de su identidad corporal, una primera área se preocupa del desarrollo de la parte de responsabilidad que a cada uno le corresponde en el crecimiento y funcionamiento de su propio cuerpo.
  • Reconociendo al hombre como un ser inteligente que puede lograr por sí mimo su realización personal, se propone a continuación el desarrollo de la capacidad de pensar, innovar y utilizar la información de manera original y relevante. (creatividad)
  • Destacando que el hombre se diferencia de todos los otros seres creados por su capacidad de distinguir entre el bien y el mal, entra luego a desarrollar la disposición permanente de la voluntad para organizar las fuerzas e impulsos de la persona de acuerdo a un principio regulador de naturaleza ética. (carácter)
  • Confirmando la resonancia que los afectos tienen en la historia interna de las personas, una cuarta área se preocupa de que los jóvenes obtengan y mantengan un estado interior de libertad, equilibrio y madurez emocional, integrando la vida afectiva al comportamiento.
  • Como no es posible comprender al ser humano sino en relación con los demás. Otra área atiende al desarrollo de la dimensión social de la personalidad, con énfasis en el aprendizaje y práctica de la solidaridad. (Sociabilidad)
  • Y como tampoco es posible arrancar de la vida humana su vocación hacia lo trascendente, la sexta área de crecimiento desarrolla en los jóvenes la aspiración a establecer vínculos personales con Dios, la capacidad de asumur la fe e integrarla a la vida y la disposición a respetar las distintas opciones. (Espiritualidad)
De esta forma, las áreas de crecimiento conforman una armonía integradora que comprende el desarrollo del cuerpo, la estimulación de la creatividad, la formación del carácter, la orientación de los afectos, el sentido de los otros y el encuentro con Dios.
La salud, la realización personal, la identidad, la madurez, la integración social y la propia felicidad, dependen de un desarrollo armónico de todos esos aspectos.

LOS OBJETIVO S TERMINALES
Definidas las áreas de crecimiento, es necesario fijar a continuación, dentro de cada área, los objetivos terminales que se proponen para el proceso educativo del Movimiento Scout.

Estos objetivos terminales se expresan en conductas deseables y oservables al momento del egreso de un joven del Movimiento, esto es, alrededor de los 22 años.

Ellos concretan, para cada área de crecimiento y en término educativos específicos, el perfil de egreso enunciado en el Proyecto Educativo.

A diferencia de dicho perfil, cuyo carácter profético es inevitable, el objetivo terminal, basado en una experiencia acumulada sobre lo que es posible esperar de una persona al término de la progresión Scout, establece una cierta mediación educativa, una especie de acercamiento entre realidad y utopía. De ahí que con relación al perfil, el objetivo terminal representa una aproximación a lo posible.

No obstante, su mayor componente valórico es de inmediato reconocible, ya que han sido fijados con base en un deber ser, el que está conformado por la jerarquía de valores y conceptos fundamentales del Movimiento Scout, tal como se expresan en el Proyecto Educativo.

No podría ser de otra forma, ya que el Movimiento Scout, como todo proceso educativo, está comprometido con determinadas opciones valóricas cuya significación debe quedar manifiesta y el objetivo terminal, puesto al final del proceso de formación Scout, es la oportuniad apropiada para enunciarlas.

lunes, 11 de agosto de 2008

Proyecto Educativo del Movimiento Scout. Parte 2


Método y Perfil.

NUESTRO MÉTODO EDUCATIVO
Para lograr nuestro propósito, obtener que los jóvenes encarnen en sus vida los principios propuestos y sean el hombre y la mujer que han escogido ser, recurrimos al Método Scout, el que constituye un todo integrado en el que se combinan diversos elementos:

·
Adhesión a la Promesa y a la Ley.
El principal elemento de este método es la invitación personal a cada joven, en un determinado momento de su progresión, para que formule su Promesa Scout. Mediante este compromiso, el joven acepta libremente, ante su grupo de compañeros, ser fiel a la palabra dada y hacer todo lo que de él dependa para vivir de acuerdo con la Ley.
La Ley Scout es un instrumento educativo mediante el cual se expresan de manera comprensible para las distintas edades, los principios que nos guían. Este compromiso será un punto de referencia hacia el cual se proyectará toda la vida de un joven.

· Aprendizaje a través del servicio.
Como expresión de los principios sociales del Movimiento, el método Scout propicia que los jóvenes asuman una actitud solidaria, realicen acciones concretas de servicio y se integren progresivamente al desarrollo de sus comunidades.
Junto con resolver un problema o aliviar un dolor, el servicio es una forma de explorar la realidad, de conocerse a si mismo, de descubrir otras dimensiones culturales, de aprender a respetar a los otros, de experimentar la aceptación y reconocimiento del medio social, de construir la autoimagen y de estimular la iniciativa por cambiar y mejorar la vida en común.

· Vida en la naturaleza.
La vida al aire libre es un medio privilegiado para las actividades Scouts.
Los desafíos que permiten a los jóvenes equilibrar su cuerpo, desarrollar sus capacidades físicas, mantener y fortalecer su salud; desplegar sus aptitudes creativas, ejercer espontáneamente su libertad, crear vínculos profundos con otros jóvenes, comprender las exigencias básicas de la vida en sociedad, valorar el mundo, formar sus conceptos estéticos, descubrir y maravillarse ante el orden de la creación.
El método Scout propone a los jóvenes integrar esta experiencia en sus hábitos frecuentes y su estilo personal, recuperando continuamente el silencio interior y retornando siempre a los ritmos naturales y a la sobriedad de vida.

· Aprendizaje por la acción.
Otro componente esencial es la educación activa, en la que los jóvenes aprenden por si mismos a través de la observación, el descubrimiento, la elaboración, la innovación y la experimentación.
Este aprendizaje no frontal permite experiencias personales que interiorizan y consolidan con intensidad el conocimiento, las actitudes y las habilidades.
De esta manera, desde el punto de vista cognoscitivo, se sustituye la mera recepción de información por la adquisición efectiva de conocimiento; en el dominio de la afectividad, se reemplaza la norma impuesta por la norma descubierta y la disciplina exterior por la disciplina interior; y en el campo motriz, la pasividad receptiva del destinatario cede paso a la creatividad efectiva del realizador.

· Aprender jugando
El juego optimiza las oportunidades de experimentar, aventurar, imaginar, soñar, proyectar, construir, crear y recrear la realidad.
Este ámbito es una ocasión de aprendizaje significativo que el método Scout privilegia como un espacio de experiencia en que el joven es actor protagónico. En el juego desempeñará papeles diversos, descubrirá reglas, se asociará con otros, asumirá responsabilidades, medirá fuerzas, disfrutará los triunfos, aprenderá a perder, evaluará sus aciertos y sus errores.

· Sistema de Equipos.
Un factor fundamental del Método es la pertenencia a pequeños grupos de jóvenes de edad similar. Estos equipos de iguales aceleran la socialización, identifican a sus miembros con los objetivos comunes, enseñan a establecer vínculos profundos con otras personas, entregan responsabilidades progresivas, dan confianza en sí mismo y crean un espacio educativo privilegiado para crecer y desarrollarse.

· Sociedad de jóvenes
Los pequeños grupos y las demás estructuras que ofrece el movimiento para que los jóvenes se organicen en torno a su propuesta educativa y desarrollen sus actividades por sí mismos evocan una sociedad de jóvenes.
Se observan en ella órganos de gobierno y espacios de participación, asambleas y consejos que enseñan a administrar las discrepancias y a obtener los consensos, organismos de tomas de decisiones colectivas e individuales, equipos ejecutivos que impulsan a la acción y logran que las cosas ocurran. Una escuela activa que integra la vida de todos los días el aprendizaje de la convivencia, la democracia y la eficiencia.
La cantidad, tamaño y nombre de estas estructuras responden a las necesidades planteadas por las características del joven en las distintas etapas de su desarrollo.

· Presencia estimulante del adulto.
En el proceso de crecimiento de los jóvenes, el educador adulto, permaneciendo como tal, se incorpora alegremente al dinamismo juvenil, dando testimonio de los valores del Movimiento y ayudando a los jóvenes a descubrir lo que a ellos solos les permanecía oculto.
Este estilo permite establecer relaciones horizontales de cooperación para el aprendizaje, facilita el dialogo generacional y demuestra que el poder y la autoridad se pueden ejercitar al servicio de la libertad de quienes se educa, dirige o gobierna.

· Marco Simbólico Sugerente.
El método presenta también a los jóvenes un conjunto de elementos simbólicos que incorporan la riqueza de los signos y conforman el ambiente de referencias propio del Movimiento. Estos símbolos motivadores estimulan la imaginación, cohesionan en torno a objetivos compartidos, dan sentido de pertenencia a un grupo de iguales y brindan paradigmas que se ofrecen como modelos a imitar. Cada una de las etapas de progresión está referida a un marco simbólico propio, el que se adopta a la capacidad imaginativa y a las necesidades de identificación de cada edad.

· Un ceremonial para la vida.
El crecimiento progresivo a través de diversos actos que conmemoran su historia personal y la tradición común, y que expresan la alegría de la comunidad por el avance de cada uno de sus integrantes. A través del ceremonial se renueva el sentido del símbolo, se refuerza la unidad del grupo y se crea el ambiente propicio para reflexionar sobre la actividad de todos los días.

· Sistema progresivo de objetivos y actividades: Un programa de jóvenes.
La expresión más visible y atrayente del Método Scout, donde se integran en concertada armonía todos sus otros componentes, es su variado programa de actividades, el que constituye para los jóvenes una oferta coincidente con sus intereses y de la cual ellos eligen lo que desean hacer.
Estas actividades, algunas de ellas fijas y la mayoría variables, permiten a los jóvenes tener experiencias personales que los conducen al logro de los objetivos que el Movimiento les propone para las distintas etapas de su crecimiento.
Esos objetivos se encaminan progresivamente al cumplimiento del Proyecto Educativo del Movimiento, se basan en las necesidades del desarrollo armónico de los jóvenes y se ajustan a sus posibilidades en las diferentes edades.
Las actividades propuestas contienen desafíos que estimulan al joven a superarse, permiten experiencias que dan lugar a un aprendizaje efectivo, producen la percepción de haber logrado un provecho y despiertan el interés por acometerlas. Por eso decimos que son desafiantes, útiles, recompensantes y atractivas.
Toda actividad que reúna esas condiciones es susceptible de incorporarse a este programa de jóvenes, el que se construye, realiza y evalúa entre todos, mediante modalidades de animación que varían según las distintas etapas de progresión.

EL HOMBRE Y LA MUJER A QUE ASPIRAMOS

Aspiramos a que cada joven que ha vivido en el Movimiento Scout, hombre o mujer, haga siempre todo lo que de él dependa para ser:

· Una persona íntegra y libre: limpia de pensamiento y recta de corazón de voluntad fuerte, responsable de sí misma, que ha optado por un proyecto personal para su vida y que, fiel a la palabra dada, es lo que predice ser.

· Una persona servidora de los demás: Solidaria con su comunidad, defensora de los derechos de los otros, comprometida con la democracia, integrada al desarrollo, amante de la justicia, promotora de la paz, que valora el trabajo humano, que construye su familia en el amor, que reconoce su dignidad y la del sexo complementario, y que alegre y afectuosa comparte con todos.

· Una persona creativa: Que se esfuerza por dejar el mundo mejor de cómo lo encontró, comprometida con la integridad de la naturaleza, interesada por aprender continuamente, en búsqueda de pistas aún no exploradas, que hace bien su trabajo, y que, libre del afán de poseer, es independiente ante las cosas.

· Una persona espiritual: Con el sentido trascendente para su vida, que camina al encuentro de Dios, que vive alegremente su fe y la integra a su conducta y que, abierta al dialogo y a la comprensión, respeta las opciones religiosas de los demás.